Farmacias: ¿Precios similares entre ellas o negocio puro?

Buenos días.

Hoy no vengo a hablar de ningún producto sino a hacer una queja/reflexión sobre la diferencia de precios que podemos encontrarnos entre unas comunidades.

Hasta hace poco yo pensaba que las farmacias eran uno de esos sectores en los que los precios estaban más o menos normalizados, que no había grandes diferencias entre unas y otras porque los precios de venta los marcaban los laboratorios. Por supuesto hoy en día las farmacias son un negocio cómo cualquier otro, algunas aparentemente más preocupadas por su surtido cosmético y nutricional que por el de medicamentos. Y algunas más bien empiezan a parecer perfumerías, cosa que sería estupenda de no ser por los precios abusivos que implantan algunas de ellas.

Concrétamente mi experiéncia ha sido con la farmacia Alonso Casabella en la calle Cigüeña de Valladolid. Llevaba tiempo queriendo Sébium Pore Refiner de Bioderma, cuyo precio en toda España oscila entre los 18 y los 20€. Y no es que lo diga yo, es el precio que teóricamente marcó Bioderma en su nota de prensa sobre el lanzamiento del producto, y el precio al que innumerables chicas lo han adquirido en su farmacia.

Pues bien, mi aventura empezó con encontrarlo, ya que de las farmacias que aparecen cómo distribuidoras en mi zona en la web de Bioderma en dos no sabían ni de qué producto les hablaba y en otra no eran conscientes de haberlo vendido nunca pero "lo podemos buscar". Después de recorrer media ciudad llegué a la farmacia de marras dónde después de buscar un rato descubrieron de qué producto les estaba hablando y me informaron de que si lo tenían pero que tendrían que pedirlo a la otra farmacia porque en esta no les quedaba y que si lo quería me lo encargaban y podía recogerlo al día siguiente. 

Contenta por haberlo localizado por fin le dije que me lo encargase y escuché como tímidamente y en voz baja la chica que me estaba atendiendo preguntaba por teléfono a su interlocutora de la otra farmacia qué precio tenía el producto. Concluyó con un "aha" y colgó el teléfono, y yo me fui tan contenta por haber encontrado mi Pore Refiner.

Al día siguiente volví a recogerlo y cual fue mi sorpresa cuando al ir a pagar la chica me dice "Son 24€". Me quedé helada porque tenía la impresión de que el precio rondaba los 18€, pero cómo no estaba segura pagué y me fui. Cuando llegué a casa lo primero que hice fue ir a Google y consultar los precios del producto por todos los blogs y páginas de opinión que encontré y, efectivamente, en todas confirmaban que el precio variaba entre 18 y 20€. Y no es que la farmacia me cobrase el traspaso, práctica bastante extendida por cierto, ya que el precio venía marcado en la caja.

Mi cabreo era monumental, por lo que escribí a Bioderma España para que me confirmasen el precio recomendado de su producto. A día de hoy, meses después aun no me han contestado, cosa que en mi opinión pone un punto bastante negativo a la atención al cliente pero que por desgracia no es extraño en España. Mientras en otro países las marcas se preocupan en extremar la atención en este tema en España se lleva más lo de pasar de el cliente y pensar que es idiota. Muy bonito.

En conclusión, puede que en la farmacia Alonso Casabella se llevasen cuatro euros de más con este producto, pero desde luego son lo últimos que van a obtener de mi ya que no pienso volver a pisar por ella. No yo ni nadie a quien conozca y pueda avisar. A robar a un camino señores, a mi no.

Y respecto a Bioderma viendo el trato que tienen hacia sus clientes me pensaré muy mucho volver a comprar algún producto suyo. Una empresa no vive sólo de tener buenos productos, una parte básica es tener contentos a sus clientes. Recuérdenlo.

Actualización: Se han puesto en contacto conmigo desde Bioderma lamentando lo ocurrido y me han explicado que ellos solamente pueden controlar el precio de venta en los puntos de venta autorizados, los que aparecen en su web. En el resto la mercancía se compra a través de distribuidores que aumentan el precio para obtener su propio margen de beneficio y sobre los que no tienen control alguno.